Escribo esto unas horas después de terminado nuestro encuentro con los candidatos a la Gubernatura de Puebla, las sensaciones son agridulces, por un lado, estoy muy contento de que todo resultara bien, de los acuerdos, de la solidez del sector empresarial … pero, siempre hay un pero, varios en este caso…
Vamos a atender los “peros” más adelante, primero vamos a lo positivo. Sin duda alguna, somos un sector empresarial sólidamente coordinado por el CCE, con una agenda construida a partir de los grandes temas que nos importan, no es algo común en el país, ya que encontrar las coincidencias entre las diferentes agendas y necesidades de los sectores productivos no es tarea fácil, se requiere de un liderazgo genuino en el CCE y de la voluntad y generosidad de los presidentes de los organismos que lo integran.
Segundo, los tres candidatos: Alejandro Armenta, de la Coalición Sigamos Haciendo Historia; Fernando Morales, de Movimiento Ciudadano; y Eduardo Rivera, de la coalición Mejor Rumbo para Puebla, acudieron sin condiciones, se presentaron a dialogar, cada uno por separado, con los empresarios. Le entraron a todos los temas en un ambiente de respeto y cordialidad.
Tercero, las coincidencias. Con los tres estuvimos de acuerdo en que la seguridad es una prioridad, aunque cada uno tiene su propia propuesta, es dolorosamente claro que la estrategia de “abrazos a los delincuentes” no funciona y cambiarla es obligatorio.
Los tres aspirantes coincidieron también en fortalecer el desarrollo económico y social del estado, involucrando al sector empresarial en un ejercicio de gobernanza con participación constante en las próximas acciones de gobierno. También hablamos de crear fondos y áreas especializadas que beneficien la atracción de inversión al estado, el impulso a la economía circular y local en un programa transexenal.
Robustecer el sistema de mejora regulatoria mediante la implementación de nuevas tecnologías y la digitalización de todos los trámites como principal acción de combate a la corrupción, fue un elemento constante en las 3 participaciones.
¿Y los peros?
Hay varios, pero el principal es los “cómos”. Dentro del CCE y los diferentes organismos vamos a revisar cada propuesta para entender su viabilidad. Será fundamental definir con quien resulte electo, dado que los tres estuvieron de acuerdo, cómo ejecutar ese “plan conjunto de gobierno”.
Otro pero es la sensación de que nos están diciendo exactamente lo que queremos escuchar, un discurso a la medida de cada audiencia, impecablemente se refieren a nuestras necesidades y anhelos con respuestas perfectas.
Aquí será fundamental contrastar a cada candidato contra su yo del pasado, sus propuestas contra sus acciones realizadas; ¿de qué sirve que nos prometa diálogo constante, si nunca se dejó ver cuando ejercía en su posición anterior?, ¿podemos creer que tendrá una gestión transparente, si sus acciones iban en contra de las instituciones?, y así podríamos seguir por mucho tiempo.
Esto aplica para los aspirantes a la Gubernatura, pero también para las Presidencias Municipales, el poder legislativo y la Presidencia de nuestro país.
Cada candidato tiene un pasado que lo pinta de cuerpo entero, todos tenemos derecho a cambiar y ser mejores personas, mejores funcionarios, pero tus acciones también hablan por tí. Afortunadamente, las redes sociales tienen memoria, cuando a nosotros nos falla, consultemos, investiguemos, preguntemos, revisemos entrevistas pasadas, acudamos a sus eventos, cuestionemos y exijamos que debatan y contrasten sus ideas y propuestas.
En la Coparmex, estaremos reuniéndonos con los distintos aspirantes que acepten dialogar sobre nuestro “Acuerdo por una Puebla con Desarrollo inclusivo” e invitándolos a firmarlo.
La democracia es construcción de acuerdos, todos importamos y merecemos un gobernador que entienda que trabaja para todos los poblanos, los que votaron por él y los que no, y eso sólo puede suceder en la medida en que todos nos involucremos en el proceso de elección, no sólo se trata de votar, hay que hacerlo informado y para estar informado hay que hacer nuestra tarea.