#manual de usuario
Por Luis García Díaz. Twitter: @luis_garciadiaz
¿Qué es el síndrome de Diógenes digital?
Si al síndrome de Diógenes o acumulador compulsivo le añadimos la coletilla “digital” al final, nos topamos con uno de los primeros síndromes provocados exclusivamente por material tecnológico. Se trata de un defecto psicológico que “obliga” al que lo padece a guardar todo tipo de archivo con el que se topa en Internet: películas, discos, programas de radio, etc.
Pero cuidado, esto no significa que si nos cuesta borrar algún archivo de nuestro ordenador ya automáticamente padezcamos este tipo de trastorno digital: nos referimos a aquellos sujetos que descargan una película y son incapaces de borrarla aún después de haberla visto, que no pueden eliminar ningún archivo creado, aunque sea inútil, o bien aún no saben lo que es utilizar la papelera de reciclaje.
Así muchos nuevos usuarios de la computadora padecemos de este trastorno moderno, y es que hace uno años el costo por Megabyte o por Gigabyte (GB) ha ido disminuyendo de manera drástica, recuerda usted cuando se tenía que grabar usar discos de 3 ½ pulgadas o peor aún los discos grandes de 5 ¼, mismos que luego fueron reemplazados por los cómodos CD de 700 MB y posteriormente DVD de 4.7 GB (4,700 MB) que permitieron a los usuarios guardar, movilizar y compartir gran número de datos, actualmente las famosas memorias USB son parte de nuestra vida con tamaños que van desde los 16 MB ( la primera que tuve fue de este tamaño) hasta las actuales de 32 GB.
También ha pasado lo mismo con los discos duros, que han ido desde los 16 MB en sus inicios hasta los 2 terabyte (2,000 GB) pero el tamaño de arreglos o conjuntos de discos duros permiten que los servidores domésticos de medios digitales tengan hasta 16 GB en su domicilio a un relativo bajo costo.
“El conocimiento es poder”… pero cuando ese conocimiento no es aplicado, interiorizado o simplemente leído, se vuelve basura digital, hace algunos días me encontré a mí mismo revisando mi disco duro, 420 GB de libros sin leer; más o menos 4,500,000 archivos pdf, Word y otros más, de manera que si decidiera leer exclusivamente estos libros, sin descansar, ni comer, exclusivamente leer tendría material para leer durante los siguientes 450 años, pero porque es difícil borrar algo, me he encontrado con ideas que puedas ser la clave de esta actitud de acumulador. La primera idea es una pregunta simple: ¿Y si después lo necesito?; Pregunta sencilla pero decisiva para entender el síndrome, pareciera que todo tiene que ver con la necesidad de no perder la está “valiosa” información; la segunda pregunta: ¿Y si no lo vuelvo a conseguir? Al conjugar las dos preguntas anteriores damos con el origen del síndrome, se trata de una actitud de estar siempre preparado para cuando algún día tenga la necesidad de esta información, pero también se presenta la horrible idea de no volver a tener algo que ya tenía en mi poder y por lo tanto me podría en ventaja de mis “enemigos”. Estas ideas seguramente provienen de mi mente primitiva que busca tener más ventajas para sobrevivir, y poder tener las herramientas cognitivas para superar a quien pudiera tratar de quitarme lo que es “mío”.
Después de todo solo somos animales, disfrazados de seres racionales.